martes, 28 de diciembre de 2010

Nueva Versión del Cantar del Mío Cid

Acaba de salir a la luz un fragmento desconocido de la gran obra de la épica castellana, el Cantar de Mío Cid. 
Dicho escrito, ha sido protagonista indiscutido de la tesis del filólogo medieval Benavides Lega Jover, dicha tesis lleva como título "La épica europea en general, la española en particular y la castellana ya afinando mucho" .

Como suele ocurrir en estos casos, todo ha sido fruto del azar, ya que dicho fragmento del Cantar se encontró, por casualidad, entre los papeles viejos que el prior del Monasterio de Silos usa para encender el picón del brasero del refectorio, según palabras textuales del prior... "hijos míos a mi edad los sabañones me matan".

Y es que andaba un novicio avivando el fuego del brasero cuando unas letras en cursiva medieval llamaron su atención. Tras su restauración se ha podido transcribir su contenido.

El fragmento en cuestión, estaría incrustado en el acto de subida al trono de Alfonso VI, y hace que todo el significado e interpretación del Cantar a partir de ese punto varíe notablemente.

La escena que describe este nuevo párrafo es la siguiente:

"...juntáronse todos los nobles y señores de Castilla y de León jurando fidelidad al Rey Don Alfonso, cuando el Señor de Chumillo deslizose tras el buen Rodrigo y susorrole al oído, dice el conde de Lemos que van dos maravedíes a que no hay gónadas para pedirle al Rey que jure que no mató a su hermano Sancho..."

El resto de la historia creo que ya es conocida de todos....


¡¡¡Feliz día de los Inocentes!!!

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Mitos Navideños VI. Papá Noel


La tradición de Papá Noel, como casi todas las tradiciones, tiene cierto poso histórico, mucho de mitología y mucho de leyendas, alguna urbana.

Santa Claus, es una amalgama de tradiciones europeas y cristianas. El padre de Santa Claus es San Nicolás de Bari o San Nicolás de Mira. San Nicolás fue un obispo cristiano de la localidad de Mira, en la actual Turquía, del que se dice que ayudó a tres hermanas, que al ser pobres no podían aportar dote para una boda y por tanto estaban abocadas a la soltería de por vida. Se dice que San Nicolás se deslizaba por la ventana de la casa de las hermanas cada vez que una de ellas llegaba a la edad casadera, introduciéndoles una bolsa de monedas dentro de los calcetines que estas colgaban para que se secaran por las noches en la chimenea.

Cuando siglos después de la muerte de Nicolás, Mira es invadida por los musulmanes los cristianos rescatan sus restos que son depositados en la localidad italiana de Bari, de aquí la dualidad del nombre y el hecho de que en Oriente sea conocido como San Nicolás de Mira y en Occidente como San Nicolás de Bari.

Hasta aquí la parte cristiana del asunto, el contrapunto pagano de Papá Noel lo tenemos en las diversas tradiciones europeas de personajes que durante estas fechas repartían regalos entre los niños, en España ejemplos de estas tradiciones las tenemos en el Esteru cántabro, un leñador que deja regalos en las casas por Navidad, el Olentzero vasco, el carbonero que descendía de los montes con un saco de regalos, el Apalpador gallego o el Tío Nadal catalán, aunque este último no es una figura humana sino un tronco al que se le "dá de comer" a partir del 8 de diciembre y que cuando llega la Navidad se le dan golpes, antes se le quemaba, para que "cague" pequeños regalos y chucherías, y es que la tradición catalana navideña parece que es muy orgánica, ya que además de este "leño cagador", no podemos olvidarnos del también tradicional Caganer de los belenes.

La fusión entre San Nicolás y estos personajes tradicionales ocurrió en Holanda, donde San Nicolás se convirtió en el repartidor de regalos en Navidad. En Holanda la representación tradicional de Santa Claus es vestido de obispo y no la que todos tenemos en mente. De la mano holandesa la tradición llegó a su colonia norteamericana de Nueva Amsterdam, actual Nueva York. Y ahí permaneció latente Santa Claús hasta que en 1809 el escritor Washington Irving lo rescató en su sátira Historia de Nueva York, pero fue el poeta Clement Clarke el que dio la forma actual al mito de Papá Noel en uno de sus poemas,  aunque el Santa de Clarke era un duendecillo enano y delgado, este ya se movía en su tradicional trineo de nueve renos capitaneados por el también famoso Rudolph.

La imagen de barbudo gordinflón llegaría con el dibujante alemán Thomas Nast para las tiras navideñas en Harper's Weekly en 1863. Y para completar a Papá Noel solo nos queda hablar de su traje, y es que la vestimenta de Santa Claus es el origen de la leyenda urbana que atribuye el diseño rojo y blanco a Coca Cola, lo cual no es cierto, ya que estos colores habían sido utilizados antes de la famosa campaña publicitaria de las Navidades de 1931. Lo que ocurrió es que Coca Cola eligió estos colores, entre todas las representaciones de Santa Claus, por la coincidencia con los suyos corporativos y fue el éxito de dicha campaña el que universalizó la figura que todos conocemos de Papá Noel. Lo cierto es que esta ropa tan peculiar está basada en la vestimenta de la jerarquía católica de finales del XIX principios del XX, como bien se puede apreciar, por poner un ejemplo, en este cuadro de Pio IX (Pio Nono para los amigos):




Y para terminar solo me queda desearos unas muy felices fiestas a todos.


Fuente de datos: Wikipedia
Foto1: Santa Claus de Nast de 1863
Foto 2: San Nicolás Holandés
Foto 3; Papá Noel de la campaña de Coca Cola

viernes, 10 de diciembre de 2010

El Burgo de Osma

Con esta entrada espero poneros los dientes largos, y es que este pasado puente de la Constitución lo pasé en la localidad soriana de El Burgo de Osma.
 
Para la ocasión nos alojamos en el Hotel Termal de la localidad, que está ubicado en el edificio de la antigua Universidad de Santa Catalina, un edificio del siglo XVI, con un grandioso claustro renacentista y una vistosa fachada plateresca, además, la piscina termal está instalada en lo que era el antiguo aljibe, es decir, todo un lujo:

Pero no solo de baños y claustros vive el hombre, así que pasear por las calles de la localidad, es el segundo de los placeres que tiene El Burgo de Osma, y para muestra su Calle Mayor:


Una de las primeras cosas que llama la atención del visitante de El Burgo de Osma es el descubrir que una localidad relativamente pequeña cuente con una Catedral, la de "La Asunción de Nuestra Señora", y es que la sede episcopal de la provincia de Soria no está en la capital provincial, sino en El Burgo. Y lo ha sido al menos desde el siglo VI, ya que en las actas del decimosegundo concilio de Toledo aparece la firma del obispo Johannes, Oxomensis Episcopus.

La actual catedral, aunque gótica en su conjunto, es una amalgama de estilos, ya que conserva aún algún resto del primitivo templo románico, pasando por el barroco y el neoclásico; este último estilo vino de la mano del confesor de Carlos III, el burguense fray Joaquín de Eleta que trajo a los mejores arquitectos de la corte como Villanueva, Sabatini o Maella, los cuales dejaron también su impronta en la catedral. Del viejo románico solo queda la cripta del sepulcro de San Pedro de Osma, y lo destacable de este sepulcro-cripta es que conserva gran parte de su policromía original, y como una imagen vale más que mil palabras...

 Y es que el pueblo de El Burgo de Osma, rezuma historia por los cuatro costados, ya que estamos ante una de las localidades más antiguas de nuestro país, heredera de la arévaca Uxama, que posteriormente fue romana, visigoda, musulmana y cristiana de nuevo. Y todo ello ha dejado su huella, pero para verla completa hay que salirse a las afueras, donde se encuentra el yacimiento de Uxama. Es poco lo visible y mucho lo que queda por descubrir, entre lo visible, está la villa romana de los Plintos, la cisterna de agua que recogía el caudal proveniente de Ucero, a unos 16Km de distancia, y todo ello coronado por una atalaya árabe. Atalaya, construida sobre los cimientos de una casa romana, de las que el califato cordobés erigiera a lo largo de la frontera del Duero.


Desde lo alto de esta atalaya puede uno disfrutar de una de las mejores vistas del entorno:

 El día que yo subí tuve la suerte de estar en la más completa soledad, bueno solo, lo que se dice solo no estuve:

Y si a todo esto añadimos una gran gastronomía y un excelente vino, ¿puede uno pedirle algo más a un puente?