miércoles, 12 de noviembre de 2008

Darío el Grande



Quiero pedir perdón por mis semanas de ausencia... pero es que he sido papá y mis nuevas responsabilidades me han tenido desenganchado por este tiempo.
El niño lleva el nombre de Darío, no pretendo que llegue a ser tan conocido ni poderoso como el afamado rey persa del que hemos tomado prestado el nombre.

Así que valga como homenaje a mi hijo, y en representación del inicio de mi viaje más apasionante, esta entrada la dedicaré a contar como llegó Darío al trono del Imperio Persa.

....
A la muerte de Ciro, le sucedió su hijo Cambiases, de este hay crónicas que hablan que no andaba muy allá en lo que a estabilidad mental se trata. A Cambiases un oráculo le vaticinó que su hermano iba a arrebatarle el trono, por lo que decidió quitárselo de encima de la manera como se solucionaban estos problemas por entonces... mandando asesinarlo. Pero claro esto como que no era políticamente muy correcto por que lo que no se le dió mucha publicidad al asunto.
De tal forma que los problemas de Cabiases iban de mal en peor, este terminó por quitarse la vida y un grupo de magos (sacerdotes) haciéndo pasar a uno de ellos por el difunto hermano accedieron al trono.
Esta usurpación fué conocida por un grupo de nobles que según cuenta Herodoto entraron en el palacio a mandoble limpio hasta tirar por la ventana al tal mago... esto me parece un poco peliculero pero lo que si es cierto que hubo un movimiento armado de la nobleza para hacerse con el poder.
Entre estos cabecillas se encontraba nuestro protagonista de hoy, y para decidir quien de ellos sería el nuevo rey decidieron quedar en un determinado sitio y que el caballo que primero relinchara su dueño sería el ganador, esto se conoce como hipomancia o adivinación por los caballos.
Así que lo que hizo el bueno de Darío fué mandar a un criado con su caballo y alguna yegua en celo al lugar de la cita la noche da antes. De esta manera cuando el noble bruto llegó al mismo sitio a la mañana siguiente pusose loco de contento a relinchar consiguiendo de esta manera la corona para su jinete.

1 comentario:

Jose Antonio dijo...

Felicidades por tu paternidad y te deseo lo mejor del mundo mundial.

Saludos Cordiales.