lunes, 23 de agosto de 2010

"Hazañas" Bélicas V. El sitio a Cartagena de Indias

Si algo hay que destacar de Inglaterra a lo largo de la Historia es su dominio del marketing, y es que la Pérfida Albión ha sabido como nadie magnificar sus glorias y hacer desaparecer sus derrotas. De todos son conocidas sus victorias sobre la Armada de Felipe II y en Trafalgar, pero no son tan conocidos los fracasos que cosechó su Contraarmada al mando de Frances Drake y la huida de Nelson de Tenerife derrotado y manco. Pero la entrada no irá sobre ninguna de estas “Hazañas”, la cosa va sobre el ataque inglés a Cartagena de Indias.

Y es que andaba mediado el siglo XVIII cuando la Marina Británica al mando del almirante Vernon andaba tocando las narices por las posesiones españolas en América. Vernon atacó y tomó en el istmo de Panamá la ciudad de Portobelo, la cual estaba defendida por 700 soldados españoles, ya sabéis porque hay un Portobelo Road en la capital inglesa.

Envalentonados por esta victoria Vernon posó su mirada sobre la plaza de Cartagena de Indias, pero allí se las tendría que ver con el, posiblemente, mejor militar que España ha dado al mundo, se trataba Blas de Lezo, un vasco de Pasajes que se había dejado una pierna, un brazo y un ojo luchando contra piratas norteafricanos e ingleses. Al reto del inglés el de Pasajes respondió:

«Puedo asegurarle a Vuestra Excelencia, que si yo me hubiera hallado en Portobelo, se lo habría impedido, y si las cosas hubieran ido a mi satisfacción, habría ido también a buscarlo a cualquier otra parte, persuadiéndole de que el ánimo que faltó a los de Portobelo, me hubiera sobrado para contener vuestra cobardía».

El ataque a Cartagena no iba a ser algo tan “sencillo” como el de Portobelo, ya que se las tendrían que ver con 3 magníficas fortalezas, la de San Luis de Bocachica, la de Bocanegra y la de San Felipe de Barajas. Para ello los ingleses movilizaron 27.400 soldados reforzados por 4000 reclutas de Virginia, estos últimos al mando de Lawrence Washington, hermano de un tal George Washington que no se si os sonará de algo. Todas estas tropas se embarcaron en 186 naves, constituyendo la que fue la mayor flota de invasión de la Historia, solo superada por la flota aliada del desembarco de Normandía durante la Segunda Guerra Mundial, y aún en nuestros días sigue siendo la segunda del ranking.

Para enfrentarse a esta tropa Blas de Lezo contaba con  6 naves, 3000 soldados y 600 arqueros indígenas. Eso si, tremendamente cabreados.

El 13 de Marzo de 1741 la flota británica arribó frente a la costa cartagenera, la primera víctima fue la fortaleza de San Luis, defendida por 500 soldados al mando de Des Neux. Tras 16 días de intenso cañoneo sus defensores tuvieron que replegarse. Para impedir el acceso a la segunda pieza del puzzle, los defensores, en contra de la opinión de Lezo, hundieron los dos barcos que les quedaban, los otros 4 ya habían caído en los primeros lances. Tenían la esperanza que los pecios impedirían el acceso de la flota atacante a la bahía. Pero la idea no resultó, por lo que los defensores abandonaron Bocanegra y se reagruparon en San Felipe. Observando Vernon como se iban desarrollando los acontecimientos despachó varios correos a Inglaterra anunciando la victoria y encargando la acuñación de monedas conmemorativas e indicando que en una de sus caras se representara a Blas de Lezo hincado de rodillas entregando la ciudad.
Tras esto, se inicia el ataque sobre el último reducto de San Felipe, donde quedaban solamente 600 soldados. La estrategia inglesa consiste en un cañoneo desde el mar y desde tierra, además de una maniobra para rodear la ciudadela y atacar desde la retaguardia, parece ser que esta maniobra se debió a la información suministrada por dos “supuestos” desertores españoles. Esta ruta les supuso a los ingleses cientos de bajas por malaria.

La entrada a la fortaleza era una empinada y estrecha rampa que Lezo cubrió con 300 soldados armados solo con armas blancas, estos 300 causaron más de 1500 bajas a los asaltantes. Además de esta defensa, Lezo ordenó dos tretas más, la primera hacer trincheras en zig zag que dificultaron la aproximación inglesa y le permitieron acercar a su vez su propia artillería, y la otra consistió en excavar un foso en la base de los muros, de tal forma que cuando los casacas rojas llegaron allí sus escalas se habían quedado cortas. Estos movimientos supusieron ingentes víctimas en las filas inglesas.

Con todos estos reveses, la desmoralización británica se hizo más que patente, tanto que los defensores españoles que quedaban echaron al mar a los ingleses con una carga a bayoneta calada. Y es que como diría un castizo "pa chulo yo".

Mientras todo esto ocurría en América, en Inglaterra, la prensa andaba eufórica con la “victoria” sobre España, pero con el paso del tiempo la gente empezó a preguntarse donde estaban sus barcos y sus tropas, la vergüenza nacional fue tan grande cuando se supo la verdad que el rey Jorge II prohibió a sus cronistas cualquier referencia al tema. Y no era para menos ya que la aventura les costó unos 10.000 muertos, 7.500 heridos, y la pérdida de 1500 cañones y 50 barcos.

Hace poco, se cumplió el bicentenario de la batalla de Trafalgar, para la conmemoración la Royal Navy invitó a las armadas de Francia y España, sus dos contendientes de entonces, la Armada Española envió a Gran Bretaña a dicho acto al portaeronaves Principe de Asturias y como no, a la fragata Blas de Lezo.

Pero quiero que el epílogo de la entrada nos la dé su propio protagonista, ya que cuando Vernon se retiraba con el rabo entre las piernas le envió una misiva en la que se podía leer:

«Para venir a Cartagena es necesario que el rey de Inglaterra construya otra escuadra mayor, porque ésta sólo ha quedado para conducir carbón de Irlanda a Londres ...».


16 comentarios:

La Dame Masquée dijo...

Asi es, monsieur. Parece que los ingleses hayan ganado todas las batallas, aun las que perdieron. Son expertos en el campo de la propaganda, pero claro, las mentiras tienen las patitas muy cortas, y a veces la gente empieza a atar cabos y se mosquea.

Buenas noches

Bisous

Matou dijo...

Pues, los británicos celebran que unas barcas quemadas choquen con la Armada Invencible,luego dicen que España venció Lepanto por pura suerte.

Pero, al fin y al cabo esa verguenza nacional fue un buen castigo, aunque no aprendieron...

Saludos

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Así es Dama... aquí vinieron a por lana y salieron trasquilados...

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Don Matias... y es que al final con los años se llevaron el gato al agua y durante muuucho tiempo Britania rules the seas....

Xibeliuss dijo...

No tengo muchos militares entre mis héroes de cabecera: una de las excepciones es Blas de Lezo.
Si fuera anglosajón tendría más películas que el motín de la Bounty.
Saludos.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Hola Xibeliuss... pues efectivamente si este hombre hubiera hablado inglés no habría lugar del mundo que no lo conociera... pero en este pais tan cainita somos así de tontos, como dice mi padre

◊ dissident ◊ dijo...

Sabía lo de Portobelo, y también del fallido intento británico de conquistar Cartagena, pero no tenía ni idea de todo lo demás que nos cuentas. Las descripciones de batallas y lo que condujo a ellas siempre me fascina. Una cuestión lanzada al aire: ¿por qué si se celebra lo de Trafalgar no se celebra la batalla de Cartagena de Indias?

Una entrada buenísima.

Saludos

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Dissortat... muy buena pregunta la tuya... supongo que la idiosincrasia de este pais ... y que actualmente todavía se asocia este tipo de celebraciones con un modelo de ideología.

Cayetano dijo...

Maximizar las victorias propias y minimizar o silenciar, como es este caso, las derrotas. Una vieja táctica de propaganda, utilizada ahora por los prohombres del Imperio británico, que como decía un viejo conocido, son los habitantes de las "Islas Candongas".
Un saludo.

CAROLVS II, HISPANIARVM ET INDIARVM REX dijo...

Uno de los mayores héroes de la historia militar y, sin embargo, un gran desconocido. El vasco que derrotó a Inglaterra con cita el título de un libro, el hombre que derrotó a la mayor flota de invasión naval, solo superada por el desembarco de Nomandía y mayor que la Invencible...pero como dices, los ingleses esconden están derrotas y los españoles no las lucíamos ni le dedicamos a estos héroes plazas como las de Trafalgar.

Un saludo y nos vemos a la vuelta de mis vacaciones.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

JAJAJAJA!!! lo de candongos les viene que ni pintado...

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Efectivamente Carolus... un gran desconocido... si en su momento se hubira rebautizado alguna plaza madrileña con su nombre... aunque esto tampoco garantiza mucho... porque me gustaría ver quien sabe quien era Cascorro,... Daoiz y Velarde son más conocidos pero nuestras calles están llenas de nombres cuyos habitantes desconocen su significado...

Ccasconm dijo...

Blas de Lezo los tenía que tener bien puestos, claro que era vasco. Que se fastidien los ingleses, que siempre son los buenos de la película y en realidad no sé yo si tanto.

Y muy bueno lo de enviar a la conmemoración de Trafalgar el navío Blas de Lezo. Seguro que ellos entendieron bien la directa.

Saludos

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Así es Carmen... este hombre no se amilanaba ante nada... sobre todo si para darles en toda la boca a los ingleses aún mejor que mejor.

Y lo de la fragata en Trafalgar, imagino alguno haría alguna mueca si...

David dijo...

Magnífico post.

La historia de nuestra pequeña nación está llena de grandes héroes desconocidos para la gran mayoría de españoles y los que no lo son.

En el siglo XIX, siglo en el que se empezó a desarrollar de forma más activa y masiva el estudio de la historia, España había perdido gran parte de su influencia y poder en el mundo, lo que trajo que todos esos héroes y grandes hechos protagonizados por nuestros compatriotas quedasen en el olvido oscurecidos aposta por los que llevan manejando el cotarro cultural y mediático desde entonces: Inglaterra y Francia, nuestros antiguos rivales en la hegemonía europea y mundial.

Esto es lo que hemos heredado nosotros, pero espero que este error se vaya corrigiendo poco a poco.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Gracias David... creo q tienes razón en que hemos somatizado demasiado todo lo que venía de fuera en detrimento de lo que teníamos dentro