martes, 25 de agosto de 2009

El hundimiento del Wasa

La historia está repleta de naufragios, si ir más lejos en nuestro país somos unos expertos en el arte de perder barcos en el mar por uno u otro motivo, sin embargo la entrada no trata sobre uno de los nuestros sino que está dedicada al hundimiento del barco sueco Wasa o Vasa, el 10 de Agosto de 1628 en el mismo puerto de Estocolmo, ante la presencia del rey Gustavo II de Suecia, de toda la corte y del numeroso público asistente al evento, se dio además en un día con un clima espléndido y sin ningún condicionante externo, es decir, que podríamos catalogarlo de cómico si no se hubieran producido pérdidas de vidas humanas en el mismo.

La construcción de esta nave hay que incluirla en el contexto de la Guerra de los 30 años, y el conflicto particular que dentro de la misma mantenían Suecia y Polonia. El rey Gustavo mandó construir el barco de guerra más grande de su época para el control del mar Báltico, al menos de forma disuasoria, para ello ordenó modificar el diseño de este barco para dotarlo de dos puentes y duplicar su potencia de fuego, además de sus características bélicas el barco fue ornamentado de forma espectacular como merecía una nave que ostentaba el nombre de la dinastía reinante, la familia Wasa, la ficha técnica del barco es la siguiente:

Material de su construcción: Madera de más de mil robles suecos.
Dotación: 145 marineros y 300 soldados.
Caña: 11 mts de largo.
Ángulo de giro del timón: de hasta 14 grados.
Manga: 11.7 mts.
Calado: 4.8 mts. – Quilla: 5 mts.
Desplazaba 1.210 toneladas y tenia una eslora de 70 metros.
Armamento: Un total de 64 cañones, distribuidos en : 48 cañones de 24 libras (un cañón pesaba más de una tonelada)- 8 cañones de 3 libras- 2 cañones de una libra y 6 cañones pequeños situados estratégicamente en sus puentes.
Castillo de Popa: Estaba situado a 20 metros de alto y a 15 mts sobre el nivel del mar.
Su Palo Mayor media desde la quilla: 52.5 mts..-
Tenía 3 palos y capacidad de hasta 10 velas de 1275 mts cuadrados.
El galeón media 69 mts de largo x 11.30 mts de ancho.

En el momento de la botadura, se apreció que el barco se tambaleaba de forma extraña, y cuando su capitán largó velas en la primera maniobra el barco se ladeó empezando a hacer agua por las troneras inferiores de la artillería, llevándose al fondo del puerto de Estocolmo al barco más poderoso jamás visto.

¿Por que se hundió? para contestar a esta pregunta hay que recurrir a la física, y a como se armaban esos barcos, ya que el mayor peso lo aportaban los cañones, los cuales se distribuían en los laterales del barco, además su gran altura de dos puentes hizo que su centro de masas se elevara peligrosamente, por lo que en cuanto el barco se ladeó un poco ya no pudo recuperar la verticalidad. Para que quede algo más claro, observar los siguientes gráficos, que aunque no se corresponden con la sección del Wasa, son lo suficientemente clarificadores de lo que estamos hablando:








Y como recreación artística del suceso:

En la investigación posterior se descubrió un informe que alertaba de este punto y recomendaba lastrar mucho más de lo previsto al barco para así rebajar su centro de masas, pero como el proyecto había sido cosa del propio rey, y además era el responsable último del mismo, no se tomaron medidas contra nadie por haber desoído la advertencia.

La historia del Wasa permaneció bajo las aguas bálticas hasta 1958 cuando se encuentra uno de sus cañones y las inmersiones posteriores corroboran el buen estado del barco por lo que se empieza con el proyecto de recuperación y reflote. Una vez amarrado y depositado en aguas menos profundas durante un año se fue izando el barco poco a poco hasta su completa emersión. Actualmente puede visitarse totalmente recuperado en el Museo Vasa de Estocolmo el cual fue inaugurado por otro rey Gustavo de Suecia, en este caso

Gustavo XVI Carlos XVI Gustavo.



Fuentes:
Wikipedia
www.phistoria.net
www.freewebs.com
www.histarmar.com.ar
www.weymouthlunarsociety.org.uk

9 comentarios:

La Dame Masquée dijo...

Madre mia,que mania con hacer las cosas grandes, anden o no anden. Que manía con lo de cuanto mas grande mejor. Y claro, el rey no recordó eso de "jack of all trades, master of none".

Bisous

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

A mi me hubiera gustado ver la cara de palomo que se le tuvo que quedar al bueno de su majestad....

Cayetano dijo...

Curiosa e instructiva entrada nos traes.
Así que el rey de Suecia era el que lo tenía más grande... y se hundió. ¿No estaría por ahí algún español haciendo chapuzas? Por cierto, hay un montón de Gustavos en la historia de Suecia. Allí ese nombre debe ser como José por aquí.
Saludos.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Pues en este caso somos inocentes, el constructor del barco era holandés. En cuanto a los Gustavos he cometido un error por que el rey actual no es Gustavo XVI sino Carlos XVI Gustavo...

Juan dijo...

Estos reyezuelkos absolutistas y sus caprichitos. Las ganas de pasar a la posteridad y su ambición. Ya se sabe: "la ambición rompe el saco" y lo peor: es que a ellos no les pasaba nada, les pasaba a los desgraciados de sus súbditos, en este caso sus marineros y sus obreros que vieron cómo su trabajo forzado se iba a pique en un abrir y cerrar de ojos. Una pena.

P.D. Para ser manchego de tierra adentro, veo qie te molan mucho los barcos. Será porque en un pueblecito de Ciudad Real, a los pies de Despeñaperros (de cuyo nombre ahora quiero acordarme pero no lo recuerdo por alzheimer coyuntural), se encuentra el archivo de la Marina.
Saludos.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

En el Viso del Marqués... no deja de ser curioso que el museo de la marina se encuentre en el interior... y está ahí por que ocupa el antiguo palacio de los marqueses de Santa Cruz en honor de Álvaro de Bazán para ser exactos...

Xibeliuss dijo...

Jjejejjeje
La Historia me recuerda a la Expo del 92, cuando botaron la reproducción de la Santa María...
A veces cuecen habas en todos lados.
Saludos.

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Xibeliuss... cagadas las "habemos" en todos lados... sin ir más lejos el naufragio más famoso... el del Titanic

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Gracias Pichi por tu comentario de primera mano...